Comprar una vivienda
Ventajas Fiscales

Además de todos los motivos "sentimentales" por los que nos compramos una casa, no hay que olvidar los motivos puramente fiscales. Aunque es verdad que la compra exige un desembolso mayor que cuando se alquila una casa, te puedes aprovechar de los beneficios fiscales que el alquiler no tiene. Así, aunque pagues un poco más al mes por una hipoteca, al final del año te compensará porque parte de ese dinero se puede desgravar.

Puedes deducir cada año en tu declaración y bajo el concepto de "deducción de la cuota íntegra", el 15% de lo que hayas invertido en la adquisición o rehabilitación de la vivienda, aunque tienes un límite de 9.015,18 €. En esta cantidad puedes incluir gastos adicionales como notaría, registro o impuestos indirectos.

Si has pedido una hipoteca, también son deducibles la amortización del principal, los intereses y los demás gastos ocasionados por el préstamo.

Recuerda que la deducción ya no depende del nivel de ingresos que tengas y que los porcentajes y los límites que has visto no se duplican si presentas un declaración conjunta.