De antiguo archivador a
cómodo mueble camisero Para comenzar, un antiguo archivador de papeles y
documentos ha sido convertido en un cómodo mueble camisero. La función de
uso ha cambiado por completo. Antiguamente, en casi todos los despachos y
oficinas se utilizaban este tipo de archivadores, que disponían de una
serie de bandejas extraíbles por medio de unos carriles de madera y una
puerta corredera con una llave a modo de sistema de seguridad. Con el paso
del tiempo, los despachos se han surtido de sistemas de clasificación más
sofisticados y, además, la aparición del ordenador como base de datos ha
supuesto una reducción del número de papeles a almacenar. Ahora, como
armario para camisas, es práctico, ya que la medida del mueble coincide
con la de la camisa doblada. Es una manera de tener estas prendas
ordenadas y siempre a la vista. Para pasar a ser un mueble camisero, han
sido necesarias una serie de reparaciones, tales como la correcta
colocación de los carriles, el cambio de la cerradura, etc.
Una
rueda de molino convertida en mesa En esta ocasión, hemos convertido en
mesa una antigua rueda de molino. El disco pesado que forma la rueda
giraba rápidamente alrededor de un eje y molía lo que había sobre la
solera. La función denotativa ha cambiado, ya que el uso original no tiene
nada que ver con el que se le da ahora. Lo bonito y curioso que tienen
esta clase de objetos es que, a simple vista, descubres lo que ha sido en
su tiempo y lo que es en el momento de verlo.
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